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Universidad Centroamericana - UCA  
  Número 217 | Abril 2000

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México

La agenda del PRI: manipulación, corrupción, opción por la violencia

El PRI, que controla el Estado desde hace 70 años, es fiel a dos principios: corrupción e impunidad. Sin un viraje a la política económica, seguirá creciendo la pobreza. Y si el PRI sigue controlando la Presidencia de la República, no habrá viraje.

Jorge Alonso

A mediados del mes de marzo, en París, la gobernadora de la ciudad de México, Rosario Robles, calificó el clima que estaba viviendo su país de "muy complicado" al anudarse en la coyuntura el proceso electoral, el conflicto universitario y el conflicto de Chiapas. Si a su diagnóstico se añade la situación de creciente empobrecimiento, las perspectivas se complican mucho más.

PRI: la regla de la corrupción

El Presidente Ernesto Zedillo reconoció en Davos, Suiza, que "su" candidato, para ganar las elecciones presidenciales de julio era Francisco Labastida. Las críticas en México no se hicieron esperar. El Presidente ponía al servicio de la candidatura del PRI el peso del Estado. El candidato del PAN, Fox, señaló que Zedillo intentaba sentar en la Presidencia a alguien que le cuidara las espaldas. Esta ha sido la regla de la corrupción del poder en México. Como una muestra más de que el PRI sigue comportándose como partido de Estado, el candidato priísta por el Distrito Federal entregó leche de los programas de atención a los más necesitados como parte de su campaña. El PRD llamó al PRI a no seguir manipulando la pobreza en su provecho. El candidato del PRD, Cuauhtémoc Cárdenas, destacó que el PRI primero producía la pobreza para después traficar con ella para allegarse votos.

El Subcomandante Marcos preguntó la razón de que el ejército intensificara sus patrullajes aéreos cuando Labastida visitaba Chiapas, comportándose de la misma manera que cuando iba Zedillo, lo que evidenciaba que el ejército consideraba a Labastida su jefe. El candidato panista Fox acusó a la Secretaria de Relaciones Exteriores de haberle preparado el viaje a Chile al candidato presidencial del PRI. Por todos lados hay evidencias de que el aparato del Estado está al servicio de la campaña oficial. Cuando en Nuevo León se descubrió que el dirigente del PRI había utilizado dinero del erario público para campañas priístas, éste se defendió diciendo que hacer eso correspondía a los "usos y costumbres" de su partido.

¿La hora de la democracia?

En marzo del 2000, el PRI cumplió 71 años de estar oprimiendo al pueblo mexicano. Los partidos opositores demandaron que ese partido deje de ostentar los colores patrios en su escudo, pero el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación mostró una vez más su dependencia del PRI al avalar que el PRI siga utilizando esos colores, desechando así las impugnaciones en ese sentido de la Alianza por México -que encabeza el PRD- y de la Alianza por el Cambio -que encabeza el PAN-.

S.M. Lipset, quien escribió hace años un libro clásico, "El hombre político", consideró que México no podía calificarse plenamente como una democracia porque el PRI mantenía el poder después de seis décadas, y consideró que México era un país democráticamente inestable por la gran pobreza que existía en su territorio. Apuntaba Lipset que el hecho de que un partido dure mucho tiempo en el poder acrecienta la corrupción, y sentenció que cuando el PRI dejara el poder se podría hablar que México entraba a la democracia. En este mismo sentido, el escritor peruano Mario Vargas Llosa ha declarado que mientras el PRI siga gobernando, la democracia mexicana será ilusoria.

La campaña electoral hacía prever que este trascendental cambio era posible. En la página de Internet del gobierno canadiense se pudo leer durante unos días el planteamiento de la posibilidad de que el PRI perdiera la Presidencia. Por esto, muchos analistas pronosticaron que el PRI jugaría aún más sucio y buscaría hacer un fraude para permanecer en el poder. Se denunció también que incrementar la violencia sería una de las tácticas del PRI para así captar el voto del miedo.

La mayoría de las encuestas han ido mostrando que el candidato priísta se ha estancado y que el panista se le ha acercado a tal punto que entre los dos hay un "empate técnico". Cárdenas, de nuevo candidato del PRD para la Presidencia, que estaba muy alejado de ambos, empieza a repuntar. En el día internacional de la mujer, Cárdenas, condenó las injusticias que sufrían las mujeres mexicanas y recordó a las mujeres embarazadas masacradas por priístas en Acteal y a las universitarias presas. Recordó también que cuando Labastida había sido gobernador de Sinaloa, una defensora de los derechos humanos había sido asesinada con la complicidad de las autoridades.


Imagínate México son el PRI

La campaña del PRI no logra convencer. El candidato cae en promesas demagógicas que de inmediato son desenmascaradas como inviables. En su desesperación, Labastida quiso usar el caso del FOBAPROA -el fondo para el rescate de los bancos- acusando a hermanos del candidato del PAN de haberse beneficiado de ese fondo. Fox respondió: quienes se habían aprovechado de esos dineros eran familiares de Labastida, el PRI, y los principales operadores de la campaña priísta.

La revista "Proceso" aportó datos de cómo el escándalo financiero alcanzaba a la familia Labastida y una diputada del PRD sacó a la luz nombres de implicados en el escandaloso rescate bancario: estaban el PRI, ex-Presidentes, jefes del sector obrero del PRI, empresarios ligados con el partido de Estado, y los principales responsables de la campaña de ese partido. Se demandó que se dieran a conocer todos los nombres. Para eso se requería que el disco que había dejado el auditor canadiense se pudiera abrir con la conjunción de las claves que tenían los partidos.

El PRI se negó. Temeroso, y con mucha cola por esconder, prefirió ser fiel a sus dos grandes principios: la corrupción y la impunidad. Para "lavarse", Labastida proclamó que rompía con el ex-Presidente Salinas de Gortari, pero en las listas de candidatos al Senado por el PRI aparecen notables salinistas. Nadie olvida que Labastida fue quien persiguió a internacionalistas en Chiapas, quien obstaculizó el diálogo con el EZLN y quien se empeñó en agudizar el conflicto en la UNAM. El candidato del PAN ha centrado su campaña en mostrar que Labastida es solamente "más de lo mismo". Los mensajes panistas van atacando cada uno de los graves problemas del país y rematan diciendo, ¡Imagínate un México sin el PRI, y ya!


¿Un Narcoestado?

Internacionalmente se ha dicho que México estaba a punto de convertirse en un narcoestado por el complicado tejido creado entre el crimen organizado y los aparatos estatales. El PAN acusó al PRI de tener nexos con los narcotraficantes. El PRI pidió pruebas, y el PAN respondió que bastaba con el caso del ex-gobernador de Quintana Roo, Mario Villanueva, quien estaba huyendo precisamente por las acusaciones de ser un capo de la droga. Otro de los ex-gobernadores priístas protegidos por el poder es el de Morelos, que encabezaba una banda de secuestradores. Como muestra de la gran corrupción del PRI en la dependencia encargada de procurar justicia, el Oficial Mayor de la Procuraduría General de la República, se suicidó cuando se le descubrieron cuentas de grandes sumas de dinero mal habido. En Estados Unidos, Fox sostuvo que la única forma para atajar al narcotráfico en México era la alternancia en el poder.

La oposición ha demandado al gobierno mexicano que aclare públicamente los compromisos adquiridos secretamente con el FMI en el sentido de realizar privatizaciones a cambio de un cuantioso préstamo, que se dijo sería utilizado para pagar deuda externa. Hay sospechas de que parte de este dinero pueda desviarse a la campaña del PRI. El Ejecutivo anunció un recorte presupuestario que refleja sus prioridades: mientras se le quitan más de 20 millones de dólares a la educación y más de 23 millones de dólares a programas rurales, al ejército sólo se le recortan unos 256 mil dólares. Estos recortes los hace el gobierno en momentos de bonanza, ya que el país está recibiendo un 50% más de lo previsto por el aumento del precio del barril de petróleo.


Negociación simulada, manipulación de la justicia

La privatizaciones y el recorte al presupuesto educativo tienen que ver con el conflicto universitario. El ex-rector de la Universidad Autónoma de México (UNAM), Pablo González Casanova, ha recalcado que la meta neoliberal es hacer de la universidad un objeto comercial.

Desde febrero, el movimiento estudiantil se ha centrado en la liberación de los presos políticos, los arrestados durante la violenta ocupación de la UNAM. Los estudiantes encarcelados han sido acusados de ser un peligro social. Los cargos que se les han hecho son desmesurados e insostenibles, y las fianzas para que pudieran salir de la cárcel no guardaron proporción: una jueza llegó a imponer fianzas de hasta 10 mil dólares. Cuando las autoridades de la universidad declararon que ayudarían a los padres de familia a conseguir el dinero de las fianzas, pareció una burla. Los estudiantes, que luchaban por una educación gratuita, adquirirían una inmensa deuda con las autoridades de la UNAM. Después, bajaron los cargos y las fianzas. Los diputados de oposición denunciaron que en el caso de los estudiantes presos se evidenciaba que el gobierno administraba la justicia a su conveniencia como un arma de negociación, lo que hacía evidente un uso político de la justicia. Las autoridades universitarias, que primero habían administrado una simulación negociadora, pasaban, a partir del encarcelamiento de los estudiantes, a administrar el ejercicio de la acción penal.


No sólo resistir, forzar los cambios

El movimiento estudiantil no cedió. Si bien la mayoría demandaba que no se cerraran las escuelas, también exigía con fuerza la liberación de los estudiantes presos. Fueron saliendo a cuenta gotas. El Consejo General de Huelga volvió a tomar rectoría por unos días al cumplirse un mes del desalojo policiaco. Hubo multitudinarias marchas -una de ellas con 15 mil manifestantes- exigiendo la libertad de los estudiantes presos. Marchas también en varios lugares de América Latina y de Europa con la misma exigencia. Un movimiento de padres de familia por la liberación de sus hijos se instaló en el centro de la universidad y llevó su protesta a la Cámara de Diputados, a la Bolsa de Valores y a otros puntos públicos. Como protesta, se ponían en cruces y se sacaban sangre. Su denuncia la llevaron ante la ONU, demandando la libertad de los presos políticos y su regreso a la universidad sin represalias. En esta nueva etapa, inaugurada con la violencia policial, las autoridades universitarias han perdido credibilidad y en la universidad quedaron graves resentimientos.

La Academia Mexicana de Derechos Humanos denunció que las dos cadenas de televisión habían actuado en el conflicto como jueces, no ofreciendo información objetiva sobre el conflicto universitario. Pablo González Casanova, declaró que la televisión se había convertido en "un tribunal de la inquisición", ya que los reporteros hacían preguntas a los opositores al movimiento para que lanzaran juicios condenatorios. El tribunal de la televisión se corresponde con un régimen jurídico político que transforma los problemas sociales en peligros sociales.

En este contexto, se produjo un movimiento social en torno a una escuela popular de formación de maestros en un pueblo del estado de Hidalgo. El gobierno mexicano, decidido a "solucionar" los conflictos estudiantiles no por la vía del diálogo sino por la de la fuerza, mandó a un destacamento de policías a tomar el plantel de la normal rural, pero la gente del pueblo se levantó y tomó prisioneros a gran número de policías. Después, los canjeó por los normalistas apresados por la policía. Así, Fuenteovejuna apareció en un rincón del México rural.

La privatización de la educación es una política que el Banco Mundial quiere imponer en todo el mundo. En México y en otros países se ha ido agudizando una conciencia de resistencia, atisbándose a partir de las nuevas experiencias que se dan en este cambio de época que los movimientos sociales nacionales con solidaridad internacional tienen grandes potencialidades no sólo de resistir sino de forzar cambios.


Chiapas: persiste el conflicto

Estados Unidos ha estado vigilando a doce grupos rebeldes en México y declaró que, aunque ninguno de ellos tiene capacidad de tomar el poder, sí la tienen para desestabilizar el proceso electoral.

En Davos, el Presidente Zedillo, a la par que defendía a ultranza al neoliberalismo, declaraba que en 1995 había amenazado con la represión a los zapatistas, y que fue entonces cuando logró sentarlos a dialogar. Mostró así cuál era su posición: privilegiar la amenaza. Desde México, el candidato del PRD puntualizó que la falta de diálogo en Chiapas se debía a que Zedillo no sostiene sus compromisos y falta a su palabra, y que resultaba muy grave que el gobierno pensara en la violencia para resolver el conflicto en Chiapas. Días después, en España, Zedillo declaró que el diálogo con el EZLN era un asunto "muy menor". Un diputado panista de la Comisión del diálogo de paz consideró que las declaraciones de Zedillo eran incongruentes, y los diputados opositores en esa comisión legislativa solicitaron que se demandara al Presidente una definición sobre su postura real ante el conflicto en Chiapas. Es evidente que a Zedillo no le interesa el diálogo, que el gobierno no tiene voluntad de sentarse en la mesa de negociaciones para dar una salida pacífica al conflicto, sino que quiere continuar con la guerra de baja intensidad. Un diputado panista calificó de irresponsables las declaraciones de Zedillo, afirmando que el levantamiento en Chiapas revelaba no sólo el desaliento de los indígenas de ese estado sino el de la población de todo el país.


Chiapas: un "incidente menor"

En un informe que el obispo Samuel Ruiz y el Centro de Derechos Humanos Fray Bartolomé de las Casas entregó a la ONU se afirma que las declaraciones de Zedillo en Suiza corroboran la falta de voluntad de diálogo por parte del gobierno. En Chiapas, los derechos indígenas son el recuento de lo acordado y los costos de lo no cumplido.

La presidenta relatora del Grupo de Trabajo sobre Pueblos Indios de la ONU pidió al gobierno de México y a su delegación en Ginebra que respete los acuerdos de San Andrés, y apoyó la labor de las ONGs que defienden los derechos indígenas. Por su parte, muchas ONGs consideraron que las declaraciones de Zedillo en Suiza enrarecían el entorno político mexicano. Calificaron de grave el desdén presidencial hacia la labor de las organizaciones sociales independientes del gobierno, pues el gobierno priísta había manifestado intenciones de ignorar, acallar y hasta perseguir a organismos civiles dedicados a la defensa de los derechos humanos.

El Premio Nobel José Saramago intervino en esta discusión, que tuvo lugar en la prensa internacional, para señalar que Zedillo era sólo un "incidente histórico" nada afortunado para México. Era eso-dijo- lo que se podía decir de un Presidente que consideraba el diálogo con los zapatistas como un "incidente menor", cuando a la vez mantenía en Chiapas a un ejército de más de 40 mil efectivos, cuyas acciones no sólo eran intimidatorias sino represivas.

Este "incidente menor" le ha costado a México demasiada muerte y demasiado sufrimiento. Y Zedillo ha mostrado a lo largo de los meses lo lejos que está de la democracia al no respetar los derechos humanos. Saramago se preguntó qué pretendía Zedillo con sus declaraciones, y adelantó que se trataba de preparar el ambiente para hacer avanzar a miles de soldados y paramilitares a la primera línea. Zedillo había presumido de generosidad ante el movimiento zapatista, pero Saramago apuntaba que la masacre de Acteal hacía comprender hasta qué grado llegaba esa autoproclamada generosidad. El escritor reconoció que el EZLN es lo más honrado que tiene hoy México, y uno de los graves errores de Zedillo consiste en no haber querido ser el presidente de todos los mexicanos, incluídos los indígenas.


Una revolución cultural

Chiapas es un problema de ética. Los políticos priístas se han caracterizado por estar privados de ética y de conciencia. El escritor español Manuel Vázquez Montalbán presentó en México su libro "Marcos, el señor de los espejos". En él destaca que la revolución zapatista es una revolución cultural, hecho muy importante porque ofrece alternativas a lo que hoy se presenta como pensamiento único. Vázquez Montalbán sostuvo que el zapatismo es un símbolo del malestar global. Lo ubicó como el primer conflicto de la globalización y predijo que el malestar seguirá avanzando: los sin tierra en Brasil, los desocupados en Europa, los indígenas en Ecuador... Resaltó que, aunque no eran extranjeros quienes habían provocado la revolución zapatista, sí tenían el derecho de valorarla y de entenderla.

Con motivo de la aparición de su libro "Patas arriba", el uruguayo Eduardo Galeano declaró que el cerco militar sobre Chiapas es el más grande que existe hoy en el mundo. Destacó que los zapatistas habían hecho una enorme contribución a la democratización de México, porque gracias a su presión se habían logrado importantes cambios. Afirmó que el movimiento ha conquistado la solidaridad mundial y que el gobierno pretende impedir el proceso de afirmación del derecho a la identidad.


Zedillo: una salida violenta

En febrero del año 2000 se cumplieron cuatro años de que el gobierno mexicano desacatara los Acuerdos de San Andrés firmados con los zapatistas. El senador Carlos Payán calificó la relación del Estado con los indígenas de "autoritaria". Por un lado, el gobierno iba en contra de lo que había firmado, y por otro proseguía con una guerra sucia contra los indígenas insurrectos. El EZLN recalcó que lo que posee en abundancia es memoria y aclaró que si persisten los abundantes vuelos rasantes sobre las comunidades zapatistas es porque el gobierno teme a los indígenas.

El zapatismo criticó que el criminal fuera juez, que las víctimas estuvieran en la cárcel, que el mentiroso fuera gobierno, que a la verdad se la persiguiera y a los estudiantes se les encarcelara, mientras los grandes ladrones andan libres. En su campaña, el priísta Labastida ofreció al Subcomandante Marcos que se convierta en policía. Diputados de la COCOPA mostraron preocupación por esas declaraciones que demostraban que el candidato priísta no entendía el conflicto, mientras diputados del PRD y del PAN hicieron ver cómo las declaraciones de Labastida muestran que está a favor de una salida violenta al conflicto. Un diputado del PRD alertó que en caso de que el PRI retenga la Presidencia de la República existe el peligro de que "queriendo limpiarle la casa" a su sucesor, Zedillo opte por una abierta operación militar en Chiapas.


Adiós, Don Samuel

Los obispos mexicanos vinculados al poder económico y político y ligados en la curia vaticana, sobre todo a quien fuera nuncio en México, Jerónimo Prigione -tuvo estrechos nexos con narcotraficantes y con los gobernantes priístas- tramaron la salida de la diócesis de San Cristóbal, tanto del obispo Samuel Ruiz como de su coadjutor el obispo Raúl Vera, con el objetivo de hacerle un favor al gobierno. Don Samuel tenía que renunciar porque cumplía la edad canónica, pero los grupos de poder no querían que lo sustituyera en Chiapas otro obispo comprometido con la causa de los indígenas. El obispo Raúl Vera -que hubiera sido ese sustituto comprometido-, tanto al dejar la diócesis de San Cristóbal, como al asumir la de Saltillo al otro extremo del país, denunció que había aumentado la presencia de paramilitares en Chiapas.

Don Samuel ha sido un obispo muy querido por los indígenas. También ha sido muy odiado por el gobierno. Samuel Ruiz fue pieza clave en la Comisión para el Diálogo de Paz en la Comisión de Intermediación. Ahora, al abandonar Chiapas, ha publicado una sistematización del proceso de paz y del archivo histórico documental que tuvo a su cargo la Comisión Nacional de Intermediación. Don Samuel ha destacado que la mesa de San Andrés representa un modelo de diálogo y negociación por sus condiciones -principios, agenda, formato, reglas y procedimientos-, tanto para las partes en conflicto como para dar participación en el proceso de paz a otros actores. Don Samuel ha insistido en que la crisis del diálogo no ha venido del modelo, que es solamente una tecnología social y política para solucionar conflictos.

Don Samuel se va de Chiapas convencido de que para orientar un proceso de paz con democracia se requiere que los diferentes actores tengan presentes todos los recursos y experiencias generadas a lo largo de estos difíciles años.

La más alta jerarquía de la Iglesia Católica, el Papa Juan Pablo II, ha pedido perdón a Dios por los pecados históricos de la Iglesia en sus dos mil años de existencia. Se trata de un acto encomiable. Pero a esa jerarquía le falta todavía cumplir con lo que exige el perdón: debe realizar un profundo examen de conciencia, y debe tener un firme propósito de enmienda. Sería bueno también que expiara por sus pecados presentes: por el apoyo al dictador Pinochet y por su complicidad con poderosos grupos económicos y políticos que explotan, oprimen y violan los derechos humanos en nuestros países. La visita papal a Centroamérica en 1983 debería ser analizada con lupa a la hora de pedir perdón. Hoy en México, la Iglesia católica tendría que pedir perdón por arrebatarle a los indígenas chiapanecos a Samuel Ruiz y a Raúl Vera, dos pastores comprometidos con los pobres.


La voz de las mujeres

El día internacional de la mujer, el 8 de marzo, mujeres zapatistas se tomaron una estación gubernamental de radio, y durante horas se hicieron escuchar. Dijeron que hablaban las más pobres y olvidadas, las tres veces explotadas, las excluidas de siempre. Advirtieron que entre más las encarcelaran, más fuertes se hacían. Exigieron cambiar las tradiciones que las oprimían. Declararon no haberse rendido ante la guerra sucia del Presidente Zedillo y del gobernador Albores. Denunciaron la prostitución introducida por el ejército en Chiapas. Se pronunciaron en contra de la ocupación militar de sus comunidades. Exigieron la libertad de los estudiantes presos en la ciudad de México. Clamaron en contra de la militarización y la paramilitarización de sus tierras. Ese día, Marcos mandó una carta a la opinión pública en la que narró el porqué las mujeres zapatistas no quieren llamarse a sí mismas "insurgentes" sino "insurgentas", y analizó uno de los problemas que han enfrentado las mujeres zapatistas: que los hombres las obedezcan cuando tienen cargos de..


La nueva izquierda

Pablo González Casanova le escribió a Marcos sobre la nueva izquierda, destacando que los nuevos grupos hacen análisis en los que resaltan la dominación y la explotación internalizadas, llegando a considerar al imperialismo como un fenómeno que también se internaliza. Estos grupos -dijo- saben detectar las formas que en la actualidad adopta la lucha de clases, tarea difícil, pues resulta arduo descubrir la lucha que se esconde sutilmente en las complejas articulaciones de corporaciones multinacionales y transnacionales. Estos grupos también revalorizan la democracia como participación y como representación, como pluralismo ideológico y como la articulación de los derechos individuales y los sociales.

A un año de la consulta zapatista, quienes la organizaron por todo el país manifestaron que estarán atentos para que militares y paramilitares no desarrollen acciones contra los zapatistas en el contexto de las elecciones y en los meses finales del zedillismo. Mientras, los indígenas chiapanecos cerraban tramos de carreteras y realizaban actos públicos demandando el cumplimiento de los acuerdos de San Andrés.


Recomendaciones de la ONU

La relatora de Naciones Unidas sobre Ejecuciones Extrajudiciales, Sumarias o Arbitrarias, Asma Jahangir, difundió en Ginebra un informe en el que se denuncia la persistencia de la violencia y la impunidad en México. La ineficiencia del sistema judicial mexicano ha dado lugar a un incremento de violaciones a los derechos humanos. Entre los casos más alarmantes, el informe se refiere a Acteal. El gobierno mexicano reaccionó airadamente.

Varias organizaciones no gubernamentales prepararon para la ONU otro informe alternativo sobre la situación de los derechos económicos, sociales y culturales en México. Los elementos aportados permiten concluir que las condiciones generales de un número cada vez mayor de mexicanas y mexicanos ha llegado a una situación de grave deterioro, en gran medida como resultado de las políticas de ajuste estructural implementadas en México durante los últimos 17 años. Entre sus recomendaciones, estos organismos proponen reducir el gasto militar y priorizar un aumento efectivo del gasto social.

El Comité de la ONU tuvo en cuenta este documento, y en sus recomendaciones al gobierno manifestó las preocupaciones de la ONU por las condiciones en que viven las poblaciones indígenas con acceso limitado a salud, educación, trabajo y vivienda. Hizo un señalamiento alarmado por la presencia de numerosas fuerzas militares y paramilitares al interior de las comunidades indígenas de Chiapas y de otros estados. Apuntó también la ONU que el problema de la corrupción tiene efectos negativos en los derechos económicos, sociales y culturales. Y llamó al Estado mexicano a atender las causas estructurales de la pobreza y a combatir la corrupción. El PRI es incapaz de cumplir con esta recomendación, porque él mismo es corrupción.


El sistema político produce pobreza

En Davos, Zedillo defendió a toda costa la globalización. Dijo que no conocía estudio alguno en el que se presentara una correlación entre incremento del comercio mundial y resultados negativos para México. En respuesta, en México se le llamó "globalofílico" y analistas económicos le recetaron una larga lista de artículos y libros, muchos de ellos producidos en centros académicos venerados por Zedillo. Sus declaraciones hicieron evidente que hacía tiempo Zedillo había dejado de leer y estudiar. El Presidente no puede explicar cómo, aun en sus maquilladas cifras oficiales, 40 millones de mexicanos viven en la pobreza. Sólo durante su administración, los salarios se han depreciado en más del 20%. No ha explicado Zedillo el por qué de tantos efectos negativos en la economía mexicana. Aun las cifras oficiales admiten que la extrema pobreza de México alcanza a un 28% de la población, la proporción más alta en 15 años.

Las apologías zedillistas contrastaron con pronunciamientos como los del presidente estadounidense William Clinton, quien recordó que los mil millones de pobres que sobreviven con menos de un dólar diario también son parte del mundo. Y también con lo señalado por el magnate Soros, quien lamentó el deterioro mundial y la creciente complicidad entre políticos y empresarios. Y con el propio Banco Mundial, que en reunión en las playas mexicanas de Cancún, aceptó que el 20% más pobre de la población, mexicana había recibido sólo el 3.5% del ingreso, mientras que el 20% de los más ricos se queda con el 55% de la renta total. Lamentó que América Latina fuera el continente con más desigual distribución del ingreso, y culpó por ello a las malas administraciones gubernamentales, a la corrupción y a la falta de aplicación de planes imaginativos. Todo esto contrasta con el triunfalismo malintencionado de Zedillo. La escritora francesa Viviane Forrester ha señalado que el ultraliberalismo ha secuestrado la globalización e impuesto sus falacias. Saramago ha precisado que la pobreza mexicana no es sólo un problema de Chiapas sino de todo México. González Casanova ha denunciado que ahora se ofrece como caridad lo que antes era un derecho.

Al programa de educación, salud y alimentación, denominado Progresa, destinado a los fragmentos más marginados de la sociedad -y a los que el gobierno utiliza electoralmente- se destinó un 4.2% de lo que el gobierno dio para rescatar a los banqueros. Sumados todos los programas de combate a la pobreza sólo equivalen a un 5.8% de los recursos con los que se salvó a los ineficientes y corruptos banqueros en el escándalo del FOBAPROA. Estas cifras expresan las prioridades del gobierno. De no darse un viraje en la política económica, por más dinero que se destine a los programas de combate a la pobreza, no habrá remedio. La pobreza se profundizará. Y de seguir el PRI controlando la Presidencia de México no habrá viraje. La corrupción y la pobreza crecerán sin control.

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