México
Los "éxitos" de 1995 son fracasos
Alianza Cívica realizó un referendum sobre un modelo alternativo de desarrollo. Mientras, el Presidente Zedillo sigue insistiendo en que no hay oro camino económico viable para México que el de su gobierno y que éste es un éxito.
Equipo del Centro de Reflexión y Acción Social de México
Los tumbos que sigue dando la economía mexicana, las repercusiones que esto tiene en muy distintos ámbitos y las declaraciones que la realidad económica provoca entre funcionarios del gobierno federal, empresarios, dirigentes políticos y organizaciones civiles, las alianzas, los rumores y sobre todo, los bolsillos de la mayoría de los mexicanos, siguen colocando el tema económico en el centro del escenario nacional.
En entrevista con un diario japonés, el presidente Ernesto Zedillo declaró: "México ha llevado a cabo un proceso de ajuste estructural muy profundo en su economía durante la última década. México ha levado a cabo un proceso de ajuste estructural muy profundo en su economía durante la última década. México tiene sólidas bases estructurales para crecer y dado el ajuste financiero que hemos logrado exitosamente en 1995, estoy seguro que la economía mexicana crecerá, reducirá sustancialmente la inflación y tendrá una balanza de pagos fuerte".
Las cifras lo desmienten¿A qué "éxito" se refiere el Presidente? En diciembre de 1994 se proyectó para 1995 un crecimiento del PIB de 4%. Sin embargo, el PIB se redujo en enero/95 a -1.5%, en marzo a -5%, en noviembre a -6%. Hasta el tercer trimestre de 1995 fue de -7% respecto al mismo período en 1994 y se espera que la caída total en el año será la mayor de los últimos 60 años.
¿El empleo? En 1994 se proyectó crear un millón de nuevos empleos. La realidad convirtió la proyección en dos millones de nuevos desempleos. ¿La paridad peso-dólar? En marzo, el dólar se cotizó a 6 nuevos pesos. A finales de noviembre se cotizaba a 7.72 nuevos pesos por dólar. Y después de los rumores de golpe de Estado - también en noviembre - la divisa norteamericana llegó a cruzar la barrera de los 8 nuevos pesos. Fue precisamente de nuestro principal socio comercial, del país en quien tien puesta toda su confianza el gobierno mexicano, del país que vino en apoyo de la política económica mexicana después del llamado "error de diciembre", de donde salió el rumor que tan repetida desconfianza y nerviosismo suscitó en los mercados financieros. En noviembre corrió en los Estados Unidos la noticia de que en México se había producido un golpe de Estado. La evidencia más clara sobre el origen del rumor apunta hacia la empresa Dow Jones para quien trabaja el ex Presidente Carlos Salinas de Gortari. Estas cifras y otras muchas y todo lo que uno puede ver en las calles y en los campos mexicanos desmienten al Presidente Zedillo. El reajuste no ha sido exitoso y cada vez son más graves sus costos sociales.
¿No hay alternativa?Carlos Abascal, líder de la COPARMEX agrupación de empresarios de México ha urgido sobre la necesidad cada día más apremiante de resultados. "No se puede cantar victoria ni mucho menos", ha dicho, refiriéndose a la paridad peso dólar y a la inflación.
Por su parte, la Jerarquía católica, a través del Presidente del Episcopado mexicano declaró: "No se necesitan muchas luces para decir que México se encuentra en un mal momento". No obstante, el prelado pidió tiempo y comprensión para el gobierno del presidente Zedillo.
Sin perder nada de tiempo, el proyecto económico no se desvía de su rumbo. En noviembre se firmó un nuevo acuerdo económico, denominado Alianza para la Recuperación Económica (APRE). Fue el resultado de un convenio entre cúpulas que no tomaron en cuenta ni al Congreso ni a otros sectores verdaderamente representativos de la sociedad. Las propuestas contenidas en el APRE incluyen estas previsiones para 1996: un crecimiento del PIB del 3%, una inflación del 20%, la recuperación de los salarios se proyectan dos incrementos del salario mínimo de casi 20% en total y el equilibrio en las finanzas públicas con el apoyo de un incremento en las tarifas de la gasolina, la electricidad, etc.
A pesar de este acuerdo, la desconfianza cunde en los sectores políticos, empresariales y sociales. Durante la presentación ante la Cámara de Diputados del programa económico para 1996, hecha por el Secretario de Hacienda Guillermo Ortiz, los propios legisladores del PRI expresaron sus dudas de que efectivamente se consigan estas metas. La diputada priísta y ex Gobernadora del Estado de Yucatán, Dulce María Sauri, cuestionó a Ortiz, preguntándole: "¿Por qué hemos de creer en un proyecto al que la actual inestabilidad financiera modifica en sus supuestos económicos básicos? ¿Por qué hemos de creer que, a pesar de la inestabilidad, se va a dar la superación económica?" Las dudas y cuestionamientos de los legisladores del PRD, del PAN y del PT fueron aún más fuertes. Aun así, Ortiz afirmó que el bajo crecimiento de la economía en 13 años no indica un fracaso en el modelo de desarrollo aplicado al país desde entonces. Muchos millones de mexicanos padecen con amargura lo que el Secretario se empeña en no considerar como fracaso.
En noviembre, la organización ciudadana Alianza Cívica realizó un referéndum nacional con el fin de presentar un modelo de desarrollo económico alternativo al gubernamental. Se presentaron propuestas elaboradas por distinguidos economistas y consensuadas entre más de diez agrupaciones ciudadanas. Más de 400 mil firmas apoyaron las propuestas, que se entregarán a los legisladores. Pero, de poco servirá este referéndum mientras el Presidente Zedillo y el Secretario de Hacienda continúen insistiendo en que no existe para México alternativa más viable en lo económico que la que ejecuta el gobierno.
Finalmente, un hecho ocurrido en noviembre y que refleja lo que hoy vive México: mientras casi la mitad de los mexicanos viven en condiciones de pobreza y un tercio en pobreza extrema, era detenida en Suiza la esposa del hermano del ex presidente Carlos Salinas, mientras intentaba retirar 84 millones de dólares de un banco de aquella nación, portando documentos falsos. Esa cantidad equivale al salario de un obrero mexicano durante 85 mil 200 años.
Reforma del EstadoPara el reinicio del tan esperado Diálogo Nacional para la Reforma del Estado, los partidos políticos han presentado ya sus propuestas. El diálogo tiene previstas reformas en lo político, en lo económico, en lo social y en el sistema de administración y procuración de justicia.
Aunque existen puntos en común, son evidentes las diferencias entre el PRI y los partidos de oposición. El Partido Acción Nacional está abierto a que las organizaciones civiles que califica "de clara opción por la legalidad" hagan llegar sus pareceres a la mesa del diálogo. El Partido del Trabajo considera beneficiosa la inclusión de los partidos políticos sin registro e incluso del EZLN. El PRD comparte la opinión sobre la necesidad de una participación amplia en el diálogo.
En temas electorales, los dos partidos de oposición más fuertes, PAN y PRD, difieren en algunos aspectos. Para el PAN es conveniente que se mantenga la representación del Poder Legislativo en el consejo general del Instituto Federal Electoral (IFE), que la contaduría mayor de Hacienda del Congreso de la Unión vigile la administración de los recursos del IFE y que se mantenga el financiamiento de particulares a los partidos políticos. Por su parte, el PRD considera que como los legisladores representan a su partido, su participación en el IFE provoca que algunos partidos estén sobre representados. Cree que un órgano independiente debe vigilar la administración de los recursos del IFE y que debe limitarse el financiamiento de particulares a los partidos políticos.
El PAN avanzaPara el PRI, la reforma del Estado comprende la vigencia del Estado de Derecho, la protección de los derechos civiles y políticos, la consolidación de un sistema de partidos y de un régimen electoral equitativo y competitivo, el desarrollo de un federalismo fuerte y el tránsito a un nuevo equilibrio entre los poderes públicos. Al iniciar el diálogo, la propuesta del PRI se ha centrado en la reforma electoral, mientras la de los partidos de oposición va mucho más allá: plantean reformas económicas y sociales y reformas en el ámbito de la justicia.
A la mesa del diálogo los partidos llegan después de haberse realizado varias elecciones el domingo 12 de noviembre. Es notable el avance del PAN en las zonas urbanas del país. En Michoacán principal bastión del PRD , el PRI ganó la gobernatura y el PAN 14 de las alcaldías más importantes del Estado, mientras el PRD obtuvo el triunfo en 52 alcaldías. El PAN gobernará a casi el 40% de los electores en ese Estado, y el PRI y el PRD gobernarán alcaldías mayoritariamente rurales.
En la capital se llevó a cabo la elección de consejeros ciudadanos. Sin la participación oficial de los partidos políticos, el abstencionismo llegó al 85%. En Puebla, Tamaulipas, Sinaloa y Oaxaca también se realizaron elecciones. Los resultados muestran algo similar a lo sucedido en Michoacán: un claro avance del PAN en las zonas urbanas ganó 4 de las 5 capitales de los Estados en disputa y un retroceso general del PRI y del PRD, teniendo ambos en las zonas rurales su principal zona de influencia.
De continuar así las cosas, es previsible que en 1997 el PAN obtenga la mayoría de los curules en la Cámara de Diputados.
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